Sergio Sommaruga: “La población se está inclinando a favor de la reforma jubilatoria a pesar de las falacias y el terrorismo verbal del gobierno”

Viernes, 06 Septiembre 2024 06:24
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Sergio Sommaruga, integrante del Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT y de la Comisión en Defensa del Plebiscito que promueve reformar la Constitución de la República y modificar la reforma de la seguridad social impulsada por el gobierno, expresó que “a pesar de la asimetría y del terrorismo verbal” con el que se atribuyen consecuencias “catastróficas” a la reforma jubilatoria, “un porcentaje muy importante de la población” se está inclinando a favor de la papeleta blanca por el “Sí”.

Luego del lanzamiento oficial de la campaña por el “Sí” a la reforma de la Constitución de la República y de la seguridad social, impulsada por el gobierno y realizada en el Teatro El Galpón, Sommaruga declaró al Portal del PIT-CNT que el movimiento social y obrero siente “mucho entusiasmo”, ya que se encuentra en un escenario de “participación democrática”, donde el pueblo podrá decidir, “a su libre saber y entender”, sobre la propuesta de reformar el artículo 67 de la Constitución. Esta reforma busca consagrar la seguridad social como un derecho humano y establecer tres principios fundamentales: fijar la edad jubilatoria en 60 años, equiparar las jubilaciones y pensiones mínimas al salario mínimo nacional, y eliminar las AFAP. “Estos puntos representan la base para un gran diálogo social y el rediseño de la seguridad social en Uruguay, con una visión de futuro humanista, eficiente y profunda, centrada en la dignidad de las personas”.

Sommaruga señaló que esto está relacionado con el “ADN ético del movimiento sindical, que a lo largo de la historia del país siempre ha luchado por los derechos de las grandes mayorías, ya que esa es la base para el ejercicio de las libertades”.

El dirigente sindical añadió que la campaña en favor de la papeleta blanca por el “Sí” permite al movimiento obrero y social hacer pedagogía popular, dialogar con la gente en ferias, espacios públicos, lugares de trabajo, así como en reuniones familiares o entre amigos, y que esta es una forma de “fortalecer la democracia”.

 “Uno de los grandes desafíos contemporáneos de la democracia es la disociación entre la vida privada de las personas y la construcción del espacio público, y este es un problema importante que trasciende la seguridad social. Sin embargo, al discutir sobre seguridad social, se habla de derechos, del bien común, de cómo vivimos como sociedad y cómo queremos vivir. Esto politiza, en el sentido griego de la palabra”, expresó.

Destacó el principio de “legitimidad fundamental de la soberanía”, que consiste en leer la Constitución y en que sea la gente quien vote. Sostuvo que desde su perspectiva, los grandes temas, como por ejemplo, definir qué es un derecho humano fundamental y si debe estar o no en la Constitución, deben ser resueltos por la ciudadanía.

Sommaruga, que es profesor de filosofía, expresó que hay que “debatir, presentar argumentos, fundamentos, razones y perspectivas”, y dirimir las ideas y posturas en el marco del diálogo. “Sin embargo, estamos en un campo de muchas asimetrías de poder. Por un lado, están los detractores, los opositores al plebiscito, que pertenecen a sectores de poder como el sector financiero, así como a una cierta superestructura política e institucional del país. Los propietarios de las corporaciones mediáticas, que no tienen una postura favorable hacia este plebiscito, también influyen y marcan el terreno. Por otro lado, nosotros contamos con escasos recursos económicos, lo cual también limita nuestras posibilidades de comunicación y despliegue”.

Agregó que a pesar de esa asimetría y de que, a su juicio, “el debate no ha sido de la mejor calidad por parte de los detractores, quienes han apelado a una estrategia del miedo para obnubilar la capacidad racional de las personas a la hora de tomar una decisión libre, consciente y voluntaria”, y eso ha quedado evidenciado -por ejemplo- cuando “han introducido el tema de la confiscación, el colapso del país o la inviabilidad fiscal de Uruguay a partir de esta reforma. Y esa no es una manera razonable de intercambiar puntos de vista diferentes”, opinó.

“Muchas veces, ese discurso está plagado de falacias que no contribuyen a un debate intelectualmente honesto”, agregó.

Para Sommaruga, “a pesar de la asimetría y del terrorismo verbal con el que se atribuyen consecuencias catastróficas a la reforma jubilatoria, un porcentaje muy importante de la población se está inclinando a favor de la papeleta”.

“Entre esa simpatía que venimos constatando y lo que pueda suceder el 27 de octubre, hay un trecho que debemos recorrer para asegurarnos de que la papeleta llegue a las urnas, ya que esto se define votando y no sólo con simpatía”, dijo.

 “Me atrae mucho la idea de la transversalidad partidaria, porque, a diferencia de lo que ocurre en otros países, tiende puentes y rompe brechas. Esto es el trabajador pensando como trabajador, independientemente de qué candidato o partido lo representa mejor. Además, es interesante porque desarticula algo que es muy nocivo tanto para el Frente Amplio como para el PIT-CNT: la idea del ‘FA-PIT’ de la que hablan ciertos sectores del gobierno”, destacó.

Asimismo, el dirigente sindical señaló que este plebiscito “no tiene que ver con las convergencias objetivas entre los trabajadores y el progresismo, donde evidentemente hay más coincidencias, sino con la idea falsa y manipuladora de que existe una subordinación o sometimiento entre ambas organizaciones”. Agregó que “la derecha ha intentado manipular la opinión pública en ese sentido, pero este plebiscito ha demostrado que esa idea es errónea”.

 “Tenemos que lograr que, el 27 de octubre, la gente incluya la papeleta blanca por el ‘Sí’ en el sobre de votación. Para ello, debemos repartir las papeletas antes del 27 y el mismo día en las inmediaciones de los centros de votación. Estamos realizando un trabajo territorial muy importante en todo el país, formando comisiones de apoyo al plebiscito que se encargarán de distribuir las papeletas, independientemente de los sectores políticos y sin menoscabar el apoyo que cada partido pueda brindar, ya que no somos los propietarios de la iniciativa, sino sus impulsores”, dijo.

Disonancia entre las direcciones partidarias y las bases

Recordó que en la historia democrática de Uruguay, y en el corolario de la salida de la dictadura con el plebiscito de la reforma constitucional de 1980, “hubo conductas políticas que rompieron con las estructuras tradicionales”. En el plebiscito del 80, tanto el Partido Colorado como el Partido Nacional votaron divididos, y se trataba de una elección que, en el fondo, discutía si la dictadura continuaba o si volvían las libertades públicas, “un tema mucho más profundo que este plebiscito”. Acotó que algo similar ocurrió en el referéndum de 1989, contra la Ley de Caducidad, y ahora está sucediendo lo mismo, aunque con otra fisonomía. “La soledad, me parece, es una forma de intentar disminuir la potencia del plebiscito y la transversalidad. Quizás la superestructura de los partidos políticos tenga una postura contraria a esta enmienda constitucional, pero a nivel de base, la propuesta conecta muy bien con las necesidades reales de la gente”.

De todos modos señaló que le preocupa la disonancia entre las direcciones partidarias y las bases. “Si esta hipótesis es plausible, es importante preguntarse por qué está ocurriendo. ¿Acaso las propuestas políticas y las experiencias con los distintos gobiernos han sido suficientemente satisfactorias para resolver los problemas de la gente?”, interrogó. Añadió que la política debe ser una herramienta para solucionar esos problemas. “Si esta papeleta los resuelve, no es la gente la que debe adaptarse a la política”.

 “Este fenómeno revela un nudo en las democracias contemporáneas, con el repliegue generalizado hacia lo privado, el conformismo y el deterioro del espacio público como lugar de construcción de ciudadanía y democracia. Otro problema es la desconexión entre los representados y sus representantes, entre las direcciones y las bases”, alertó Sommaruga.

Modificado por última vez en Viernes, 06 Septiembre 2024 20:05
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