Imprimir esta página

Una reforma sin la participación de los docentes "conlleva riesgo de falta de legitimidad"

Miércoles, 12 Octubre 2022 20:54
Valora este artículo
(0 votos)

En el marco de la Transformación Curricular de las Carreras de Formación en Educación, ante los documentos de Consejo de Formación en Educación(1) (CFE), las Salas Nacionales autoconvocadas decidimos hacer público nuestro posicionamiento a través de la conformación de un colectivo que denominamos “Coordinación de Salas Nacionales de CFE”.(2) Las Salas Nacionales son espacios democráticos de producción académica conformados por el cuerpo docente de todo el país. Estas Salas no son convocadas por las autoridades del CFE, razón por la cual nos autoconvocamos para debatir acerca de la educación pública.

Todas las Salas Nacionales autoconvocadas rechazamos de manera contundente los documentos que plantean la reforma actual por razones de forma y de contenido. Queremos comunicar dichas razones a la opinión pública explicitando algunas cuestiones que nos preocupan y por qué, como así también qué reivindicamos y qué proponemos.

Respecto a las cuestiones que nos preocupan y por qué:

1. Ausencia de participación docente. No se han habilitado las instancias para un diálogo profundo y profesional. Esto desacredita y deshabilita al cuerpo docente nacional, desconoce trayectos ya recorridos de compromiso con la tarea, vulnera experiencias y no permite que seamos actores de un proceso de transformación que consideramos necesario para mejorar la enseñanza a partir de los desafíos que presenta el primer cuarto del siglo XXI.

El CFE propuso cinco jornadas para que el cuerpo docente formule las mallas curriculares de todas las carreras, una tarea impracticable. Se trata de una seudo-participación que intenta legitimar una propuesta hecha a espaldas de los educadores. Este supuesto proceso democrático encubre una reforma impuesta que subestima al cuerpo docente.

2. La convocatoria actual y la transformación curricular propuestas cristalizan el desmantelamiento de la estructura académica propuesta por el SUNFD (2008)(3). Se anularon las Coordinaciones Académicas y las Salas Nacionales, debemos autoconvocarnos pues nuestra participación no tiene lugar institucional. No puede existir diálogo institucional sin estructura académica donde estemos representados los tres órdenes: estudiantes, docentes y egresados. Esta falta de espacios de discusión y elaboración permite la imposición de las autoridades de planes y programas. Más grave aún es la creación de la nueva figura llamada Dinamizador(4). Estos cargos, designados directamente por el CFE sin mediar ninguna convocatoria pública, -con actores que a menudo carecen de formación específica y cuyos criterios desconocemos-, están a cargo de la sistematización de los documentos en los que se sientan las bases del nuevo plan.

Se pretende que los docentes llevemos adelante esta discusión sin tener conocimiento de las modificaciones de las condiciones laborales(5) y la estructura de horas y cargos que harían posible sostenerlas. Es imprescindible que los docentes de formación en educación se den instancias de debate y estudio sobre las concepciones de educación y de didáctica que van a definir la formación de los futuros profesionales de educación primaria y media. Una reforma sin la participación de los docentes conlleva un riesgo futuro de falta de legitimidad y dificultades varias que generarían situaciones caóticas.

La transformación que se propone se enmarca en una única concepción de la educación, que obedece a un marco único basado en competencias que no ha sido discutido. No debería anularse la coexistencia de diferentes visiones y concepciones dentro de la formación de educadores, ello garantiza la libertad de cátedra. El documento no plantea ninguna discusión didáctica/disciplinar/epistémica profunda sobre el por qué y para qué enseñar cada disciplina, lo que debería ser el fundamento principal de cualquier transformación educativa. Se hace imprescindible discutir colectivamente sus alcances y posibilidades. El documento deja en dudas la especificidad de la Didáctica, por lo que reivindicamos las didácticas específicas, como una disciplina de investigación con objetos y métodos de estudio propios, por este motivo, es necesario que esos cursos mantengan su carácter de asignaturas específicas, como hasta el momento.

3. Por otra parte, el documento que contiene la transformación curricular carece de la calidad académica requerida para su validación (usa autores sin dialogar con ellos, cita fuentes que no referencia e incluso fue denunciado por plagio y a la fecha no ha sido modificado). La publicación y divulgación de documentos sin especificar claramente la autoría no propicia la discusión académica, puesto que la perspectiva teórica seleccionada no se asume ni se referencia. Rechazamos el plagio, su intento de justificación por parte de la Asesoría Letrada de CFE y la pretensión de solucionarlo con la compra de un Software. Entendemos que debe aplicarse el Reglamento sobre honestidad académica que el mismo CFE ha aprobado.

Una transformación curricular implica resolver y discutir políticas educativas, modalidades de gestión, aspectos académicos, administrativos y presupuestales, los cuales no aparecen plasmados en los documentos. Las autoridades no prevén las múltiples dificultades en cada una de estas dimensiones y pretenden implementar los cambios en marzo de 2023 y quieren «pasar con celeridad del discurso a la acción» (p.15). Esto muestra que desconocen que las transformaciones educativas requieren tiempo, paciencia y procesos, que son contrarios a la celeridad tan celebrada.

4. La Transformación Curricular define trayectos formativos sin prever una estructura académica que los sostenga. Se presentan cuatro trayectos: “Equivalente para Educadores”, “Prácticas Pre-profesionales”, “Formación Específica” y “Lenguajes Diversos”. Los tres primeros trayectos son producto de acuerdos sustanciales e históricos en la formación en educación y se ven reducidos en su carga horaria total sin mediar una evaluación que señale la necesidad de esa reducción. Se hace a favor de crear un cuarto trayecto definido vaga e imprecisamente.

5. Se propone la semestralización de los cursos sin una estructura académica y jurídica que la haga posible, lo que afecta las condiciones de trabajo de los docentes y el proceso formativo de los estudiantes. La semestralización conlleva dificultades contractuales al precarizar las condiciones de trabajo y eventualmente la cobertura de vacantes. Se corre el riesgo de pérdida salarial, así como la desvinculación del centro, afecta la continuidad de las propuestas de trabajo.

6. Se propone asimismo la multimodalidad, en ese sentido consideramos que la formación presencial es fundamental para el desarrollo de los saberes generales y específicos que hacen a la profesión, se entiende la enseñanza virtual como una excepción para los casos que los estudiantes no puedan acceder a la presencialidad. La modalidad presencial, no puede ser multimodal, para ello existe la modalidad semipresencial. Se fundamenta la necesidad de la educación multimodal en función de la urgencia enfrentada durante la pandemia de realizar clases virtuales. Señalamos que esta fue una situación coyuntural y no puede ser la base de la toma de decisiones sobre la educación presencial y virtual. Reivindicamos la importancia de la presencialidad en la educación en todas las modalidades actualmente vigentes.

La multimodalidad, lleva al aislamiento de estudiantes y docentes, inhibiendo el desarrollo de comunidades de aprendizaje como plantea el documento. Existen saberes vinculares y asociados a la participación en el centro, que no están incluidos en ninguna unidad curricular, pero, por la propia vivencia en la dinámica institucional se van aprendiendo, cuestionando y resignificando. Pensar en una malla multimodal implica sostén tecnológico, de conectividad y de estrategias pedagógicas para la virtualidad de lo cual el CFE debería hacerse cargo.

Las grillas propuestas para el armado de las mallas curriculares condicionan la carga horaria de todas las asignaturas. La incorporación de nuevas unidades curriculares correspondientes a “lenguajes diversos” no puede realizarse a expensas de reducir los espacios de formación básica en las disciplinas y su enseñanza. Es fundamental que en la formación de grado el estudiante adquiera un amplio dominio del conocimiento de la disciplina y de su enseñanza. La especificidad disciplinar y el lugar medular de las didácticas específicas han sido históricamente las fortalezas académicas en la formación docente uruguaya y creemos firmemente que deben seguir siéndolo.

No se conocen hasta el momento disposiciones transitorias para el cambio de plan, con su correspondiente régimen de previaturas y reglamento de evaluación, para contemplar la situación de numerosos estudiantes que tienen asignaturas previas. Esto pone de manifiesto la ausencia de seriedad académica de la transformación propuesta, afecta directamente la trayectoria educativa del estudiantado y obstaculiza su tránsito y egreso.

En el documento se fundamenta la importancia de la formación universitaria para los docentes, teniendo en cuenta los pilares que fundan la misma: enseñanza, investigación y extensión. Sin embargo, además de arrasar con la estructura académica y sus referentes, se propone un título de carácter universitario, lo que en los hechos constituye un acto administrativo que no transforma las prácticas. Las dimensiones de investigación y extensión no aparecen explicitadas a nivel de la estructura académica, ni a nivel de la estructura curricular. No se describen mecanismos para la concreción de una verdadera estructura universitaria: no se contempla la autonomía, ni se considera el cogobierno de ninguno de los tres órdenes (estudiantes, docentes, egresados). Se habla de la centralidad de los estudiantes, pero no se los considera como actores; no se planifican ni contemplan espacios, tiempos o estructuras académicas de cargos que habiliten la investigación y la extensión.

En síntesis, reivindicamos y proponemos:

Reivindicamos ámbitos colectivos para discutir la reforma y reconocimiento de lo ya producido. Una transformación de esta naturaleza necesita una estructura académica que respete la formación y la trayectoria de los docentes, sin designaciones directas, y con un presupuesto acorde a las necesidades y a los cambios que se pretenden llevar adelante. Creemos necesario respetar los procesos que se venían desarrollando en procura de la Universidad de la Educación, autónoma y cogobernada, que es el verdadero anhelo de los y las docentes.

Exigimos la reconstrucción de la estructura académica, y la consolidación de la cultura universitaria. Demandamos postergar la discusión para la elaboración de una nueva malla curricular hasta tanto no esté aprobada e implementada una estructura de cargos y grados. La estructura académica de cargos asegura las funciones de docencia, investigación y extensión, propias de una institución universitaria. Resulta insoslayable enfatizar la debilidad académica de la actual propuesta por escasez argumental, ausencia de espacios reales de discusión y de representación del cuerpo docente y por los tiempos en que se pretende resolver. Reclamamos que se postergue la implementación de la transformación de la Formación en Educación para 2024, para habilitar un plan de trabajo consensuado y con participación real durante el 2023. Para un verdadero cambio se deben manejar tiempos pedagógicos y no tiempos políticos.

Nuestra principal reivindicación continúa siendo la creación de una Universidad de la Educación pública, autónoma y cogobernada, como forma de avanzar hacia la mejora en la formación de profesionales de la educación.(6)

 

  1. “Propuesta para el Diseño Curricular de la Formación de Grado de los Educadores” y “Didáctica Práctica en la formación de los profesionales de la Educación en el Uruguay” aprobados el 6/07/22 y 4/03/2021
  2. La Coordinación de Salas Nacionales de CFE está conformada por integrantes de las distintas salas de las especialidades a nivel nacional.
  3. Sistema Único nacional de Formación Docente 2008
  4. Acta 5, Resolución 3 del 6/7/2022. Los dinamizadores para la carrera de profesorado son 6.
  5. Capítulo 14 del Estatuto del Docente de enseñanza media.
  6. El presente documento releva los argumentos de las declaraciones de las siguientes Salas Nacionales de los Profesorados de: Idioma Español, Derecho, Historia, Ciencias Biológicas, Física, Filosofía, Sociología, Literatura, Inglés, Matemática, Portugués, Comunicación Visual, Sala Nacional Pedagógico-Histórico-Filosófica, Danza, Italiano, Química y Sala Nacional de Didácticas Específicas. Incluye también la declaración de la Sala Nacional de Físico-Química de Magisterio.
Modificado por última vez en Miércoles, 12 Octubre 2022 21:52
Inicia sesión para enviar comentarios