Los asentamientos se manifestarán ante el MEF

Son casi todas mujeres con derechos vulnerados en reiteración real. Y sin embargo, se levantan una y otra vez. Y se vuelven a levantar. Cargan sobre sus espaldas la responsabilidad de apuntalar casi siempre solas, familias más o menos repletas de hijas e hijos, y de conseguir alimentos, lavar y cocinar, escuchar y arropar, abrazar y curar. Ellas crecen solas sabiendo que el Estado no estará casi nunca para casi nada. Son las que en los asentamientos, transitan el día a día junto a tantas vidas rotas, en ocasiones heridas por el consumo y la violencia, pero indefectiblemente siempre con carencias de todo tipo. Ellas no se rinden. Dan sus batallas con o sin políticas públicas, porque no pueden sentarse a esperar nada de nadie. Hace unos años, cuando la crisis de los años 90, se fueron juntando en distintos asentamientos y lograron organizar la supervivencia. 

Hoy, en pleno siglo XXI, en inhóspito territorio de jactancias neoliberales de los predicadores del ahorro y de los recortes de planes sociales, ellas han logrado conformar y  fortalecer la Coordinadora Nacional de Asentamientos. El lunes 4 de octubre, Día Internacional del Hábitat y en concordancia con el Día Internacional de los Sin Techo, las integrantes de la Coordinadora Nacional de Asentamientos se concentrarán a las 18 horas frente al Ministerio de Economía y desde allí marcharán hasta la Torre Ejecutiva, en el marco de una actividad que es impulsada conjuntamente con la Federación de Cooperativas del Programa de Vivienda Sindical (PVS), junto con la Federación COVIPRO y la Red de ollas populares.

Carina Zeballos hace bastante que estudia magisterio. Va a ser maestra. Si no fuera por las dificultades que tiene que afrontar cada día, posiblemente ya se habría recibido y estaría trabajando en una escuela. "Hace seis años que estoy cursando primero. Ahora hace un año que estoy desocupada por la pandemia y todo se me complicó porque tengo que cuidar a mi hija".

Carina vive en Valle Edén, Puntas de Manga, en un asentamiento conformado por unas 200 familias. Ella está convencida que cualquier proceso de futuro, pasa por la educación y la cultura. Precisamente, desde la Coordinadora Nacional de Asentamientos han logrado presentarse a distintos fondos para poder desarrollar actividades culturales. Son mujeres que pertenecen a 21 asentamientos de la CNA que se plegaron a esta iniciativa de intentar lograr apoyo de fondos como el Fortalecidas y el Marielle Franco, que selecciona y respalda proyectos "pensados a partir de acciones que tengan en cuenta la deconstrucción de sistemas de dominación y/o ejes de desigualdad, partiendo de la reivindicación de las identidades de las personas como múltiples y complejas, con especial foco en la ascendencia étnico-racial y afrodescendiente y/o indígena, la migración y el refugio y la diversidad sexual y de género, pudiendo incorporar otras identidades".

Carina sostiene que para quienes viven en asentamientos en Uruguay, es fundamental organizarse, aunque las dificultades que enfrentan para nuclearse y disponer de tiempo para reunirse y debatir los problemas de cara al futuro, son muy básicas. "Cuando no hay para el boleto, ni la comida, es muy difícil pedirle a las compañeras que se organicen y participen". De todos modos, la Coordinadora Nacional de Asentamientos se ha podido desarrollar y el próximo lunes participarán de la movilización por el Día Internacional de los Sin Techo en el que reclamarán al gobierno uruguayo respuestas y soluciones a la problemática de la vivienda.  

"Es central que las personas que vivimos en asentamientos estemos en este proceso de organizarnos. Particularmente las mujeres que somos las más vulnerables, las excluidas. En los asentamientos somos mayoritariamente mujeres. Hay mujeres afrodescendientes, con discapacidad, algunas que estuvieron privadas de libertad, o sea, en los asentamientos hay una parte importante de integrantes de los colectivos de mujeres en situación más vulnerable. Entre nosotras nos consideramos algo así como guerreras resilientes".

Zeballos contó al Portal que también existe una realidad preocupante de  casos de violencia intrafamiliar y de género. En muchos casos, el contexto y la vulneración de derechos puede desencadenar situaciones de depresión. "Yo cada tanto intento acompañar como puedo a alguna vecina que está viviendo alguna situación de violencia. Si a una vecina la golpearon el día anterior, lo que una puede hacer es intentar acompañar, estar ahí y a veces, asesorarla para informarle cómo puede ella proceder. Una en estos casos hace lo que puede". 

Para Carina, "es estratégico apuntalar el funcionamiento de la CNA para organizarnos, para promover acciones y tratar de ayudar a quienes más lo necesitan", aunque reconocer que sigue siendo complejo lograr una convocatoria permanente.

"Los miércoles tratamos de organizar charlas. A veces charlamos entre nosotras y otros miércoles invitamos a gente como Andrea Tuana, Karina Núñez o Colette Spinetti, que son referentes que nos sirven para apuntalar nuestro trabajo".

La referente de la CNA, remarcó que la problemática que trasladarán al gobierno en la movilización del lunes 4 de octubre, no se acota a temas de vivienda. "Creemos que el centro tiene que estar en la educación, dentro de un tema que es multidimensional. Solicitamos becas para las mujeres para que puedan formarse y estudiar, pero somos conscientes que en este momento están recortando todo. Pero nosotras vamos a insistir. Necesitamos becas para primaria, secundaria y por qué no, para educación terciaria".