Fernando Pereira y el análisis de la realidad nacional
El presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, desglosó los distintos aspectos de la actual coyuntura económica que enfrenta la realidad nacional, de cara a las decisiones que tomará el movimiento sindical para revertir los recortes en áreas sociales como la educación y la salud. Asimismo, rechazó que las actuales pautas salariales sean buenas para la actual situación del país. “No lo son” aseguró.
¿Cuál es la lectura que el movimiento sindical realiza del momento que atraviesa el país?
Estamos en una coyuntura muy particular, por un lado se generó un déficit fiscal que tiene que ser abatido por políticas públicas. La coyuntura que se da con el ajuste fiscal y las propuestas del Poder Ejecutivo, fue lo que impuso a que el movimiento sindical pusiera a consideración de los gremios un paro para el día 29 de junio. Incluso hubo propuestas alternativas de fechas, pero claramente el movimiento sindical hizo una propuesta concreta de cambio. Algunos de esos cambios fueron llevados adelante por el Poder Ejecutivo, me refiero a que la franja de menos de 50.000 pesos no se grave y se le cambie el porcentaje de deducción, con lo cual ningún trabajador que gane menos de 50.000 pesos va a pagar más de lo que pagaba. No se puede negar que es un avance.
También se quebró la franja que iba de $150.000 a $167.000 en $100.000. Y esto también es un avance.
Lógicamante nosotros ya veníamos apoyando la reforma de la caja militar y la rebaja del 2% del IVA, porque creemos que si bien hoy no llega a todos los hogares ni a todos los comercios, en perspectiva, puede ser una cuestión de avance.
¿Cuál es el aspecto más preocupante?
Es que perdimos en una cuestión fundamental, en que no cambió la filosofía de la reforma, el propio ministro lo aseguró. Nosotros pretendíamos que esta reforma fuera cubierta en su mayor parte por el capital y esto era el aumento del IRAE del 25 al 30% y el aumento del Impuesto al Patrimonio.
Claramente en esto no tuvimos resultados, lo que no implica no valorar el avance que significa para casi 175.000 que iban a gravar más y que ya no lo van a hacer. A partir de ahí surge la segunda dificultad que le fue planteada en el mismo documento que le presentó el PIT-CNT al ministro de Economía que es una inflación al 11%, aumentos nominales y naturalmente la convicción o casi certeza de que en muchos grupos salariales va a haber pérdida si se mantiene esta pauta y sobre todo si no hay correctivo anual, de forma tal que lo que le pedimos al Poder Ejecutivo es que coloque un correctivo anual, condición imprescindible para levantar medidas de lucha y hemos tenido una respuesta negativa por parte del ministro Astori porque el MEF cree que estas son las mejores pautas para esta etapa del país en esta negociación colectiva, nosotros creemos que no.
Esto nos genera una confrontación importante, de forma tal que hay dos circunstancia que nos dejan en situación dificultosa, por un lado que el Estado suspende la ejecución de gastos, unos 2.000 millones de pesos a través de este ajuste. En segundo lugar, la suspensión de gastos tiene que ver con la salud, con la educación, con el Inau, políticas públicas como la Universidad, políticas públicas reales, entonces, no es cualquier suspensión de gastos de un día para el otro.
¿Y qué se puede prever en caso que el 2017 también sea un año malo en las variables económicas? ¿Qué pasará con ese gasto?
Acá hay tres aspectos por los que el movimiento sindical va a pelear: punto número uno es el poder adquisitivo de los trabajadores para que se mantenga, para lo cual tiene que haber cambios en las pautas salariales. En segundo lugar, que haya un combate importante al tema de precios por las vías que se estimen oportunas. Nosotros hemos planteado un acuerdo a largo plazo, incluso hay planteos maduros como precios controlados. También planteamos un acuerdo a largo plazo con cumplimientos estrictos y con vigilancia estatal, de forma tal que aquel que acuerda cumple.
Y la respuesta fue negativa
Exacto, hemos tenido una respuesta negativa. Pero también planteamos un tercer aspecto de la lucha y que es clave para nosotros, y va a seguir siendo de que pague más el que más tiene, para que el que menos tiene acceda a las cosas imprescindibles para tener una vida digna.
Con estos tres factores nosotros vamos a ir a una movilización.
¿Están definidos los aspectos prácticos de esa movilización?
Ayer en el Secretariado tuvimos una primera discusión y evaluación de distintas variables, pero sin duda va a haber medida de paro.
¿Se sabe si será parcial o de 24 horas?
Veremos, lo que nosotros estamos esperando es que el gobierno nacional reaccione y al menos emita una señal contundente en términos de que los salarios no van a tener caída. Y esa señal tiene que darse rápidamente porque nosotros estamos llamando a nuestros ambitos para resolver y en cuanto se resuelva, lógicamente después es muy difícil dar marcha atrás. Hay que recordar que somos una central única de setenta organizaciones, es decir, una vez que este mecanismo se dispara...
Sin embargo el PIT-CNT suele señalar que el mejor paro es aquel que no hay que hacerlo porque se logró el objetivo que se pretendía alcanzar.
Nadie hace paro por deporte, hacés para conquistar, para seguir avenazando en el ingreso salarial pero también en las condiciones sociales, en las normas legales y de hecho en nuestra plataforma están incluidas la ley de femicidio, la ley de trabajo para las personas con discapacidad, la ley de insolvencia patronal, la reglamentación del Convenio 158, entre otras.
Es decir, hay una parte legal, una de ingresos, una social y una democrática. Entonces está claro que tenemos que jugar en todas las canchas.
Entonces la decisión de la medida pasará por analizar la coyuntura al momento de definirla...
Será la que más le convenga al movimiento sindical.
¿Qué pasa con los anuncios de inversión pública?
Se nos garantizó que se va a ejecutar la totalidad de las inversiones, el ministro de Economía nos aseguró que si. Nosotros lo que hemos pedido en esa reunión que mantuvimos es que se avance lo más rápidamente y en este sentido el Poder Ejecutivo estuvo de acuerdo en que se van a acelerar todos los mecanismos comúnmente llamados burocráticos que el Estado tiene, para que la inversión se haga en el menor tiempo posible. El aspecto positivo es la confirmación de esa decisión del Poder Ejecutivo de invertir. La negativa es que presenciamos que no es el estilo que ha tenido el gobierno a lo largo de estas últimos once años. Nos parece que se debería haber podido analizar con más tiempo si la pauta salarial es la que se adecua efectivamente a la realidad de hoy y si la pauta que fue pensada para una inflación decreciente sigue vigente para una inflación que ha sido creciente, es decir que ha tenido el comportamiento contrario al que se pensaba y esta reflexión nosotros la hubiéramos esperado de un equipo económico que es sólido. Sin embargo personalmente creo que todavía está a tiempo de releer, de reconstruir la pauta, compararla con la realidad, ver cuál va a ser el impacto en el salario real y especialmente, vigilar con mucha insistencia lo que sucede con los salarios más bajos, o sea los trabajadores que ganan menos de 20.000 pesos.