Sindicato de Docentes de Formación en Educación ante el 8M
Ante el Día Internacional de la Mujer Trabajadora como Sindicato de Docentes de Formación en Educación reivindicamos la condición de mujeres trabajadoras sobre las que recae la violencia más silenciosa, la explotación capitalista y patriarcal.
En el contexto actual donde las desigualdades se profundizan y ponen en riesgo la vida, el papel histórico y político que hemos jugado las mujeres como tejedoras de redes de solidaridad ha sido fundamental para proveer el alimento en las ollas populares y sostener a nuestras familias.
Expresamos nuestro dolor frente a todas y cada una de las muertes que resultan de los femicidios y la violencia vicaria y exigimos a las autoridades que actúen con responsabilidad preservando la vida y apliquen los marcos jurídicos vigentes que la garantiza. Exigimos asignación de presupuesto para la ley de violencia hacia las mujeres basada en género.
Como docentes de Formación en Educación hemos constatado, en tiempos de “transformación curricular”, la omisión de la perspectiva de género y de espacios académicos que problematicen las relaciones sociales y pedagógicas desde esta mirada. Esta reforma destruye las escasas referencias a las cuestiones de género y diversidad sexual que existían en el plan anterior, situación que pone en evidencia que para este gobierno la violencia no es un problema excepto cuando atenta contra la propiedad -como el abigeato-. Nuestra responsabilidad frente a la niñez y a las adolescencias nos exige acompañar y construir relaciones igualitarias, libres de violencias
y problematizadoras de las opresiones estructurales, pero en este contexto de “transformación” no hay cabida para que las y los futuros docentes puedan formarse en la perspectiva de género. Reclamamos espacios para pensar y discutir el diseño de la interinstitucionalidad de políticas públicas que respondan a las demandas de atención para educar en la deconstrucción de los micro machismos que conducen a la violencia feminicida extrema.
Los sectores conservadores han presentado proyectos de ley que están en estudio del Parlamento en los que se siembra la desconfianza sobre la docencia, se pretende criminalizar la diversidad de abordajes de lo educativo y se privatiza las relaciones laborales, recayendo en los padres y las madres la contratación y formación del profesorado. El argumento se centra en la “ideología de género”, términos que distorsionan, con intencionalidad, la perspectiva de género necesaria para evidenciar las desigualdades y actuar en consecuencia.
La docencia constituye una profesión feminizada por lo que exige políticas específicas que atiendan: el cuidado a la niñez y a las maternidades, las personas con discapacidad y la vejez; atención jurídica y psicológica para víctimas de violencia inter e intra familiar; espacio de atención específica a la salud y la salud laboral.
¡Mientras persistan estas desigualdades y violencias nos encontraremos en la luchan por una sociedad más justa!
SIDFE - Sindicato de Docentes de Formación en Educación / CSEU / PIT-CNT